En el norte de la isla, aproximadamente a 55 Km. de Palma, la capital de Mallorca, se encuentra Pollença. Una localidad distinta del resto de la isla que todavía conserva su aspecto histórico y tradicional, y se distingue de la Mallorca turística del sur.
Pollença y sus alrededores, sigue siendo la auténtica Mallorca con sus monumentos históricos, pequeñas calles y antiguas costumbres. Sus maravillosos paisajes y tranquilos lugares, invitan a disfrutar del tradicional mercado de los domingos y de las hermosas noches de verano con conciertos de música clásica, o jazz, en el Convento de Sto. Domingo, o en las plazas del pueblo.
Pollença sigue siendo hoy, como lo fue años atrás, villa de famosos pintores y poetas. En sus calles descubrirán algunos restaurantes con cartas de primera clase, que ofrecen platos de la tierra con elegancia cosmopolita.
Amplias playas, modernas instalaciones deportivas como un recién renovado campo de Golf, pistas de tenis, escuelas de vela y windsurf, centros de buceo… ofrecen un amplio abanico de posibilidades para su tiempo libre. Y nunca olvidar, los tranquilos y románticos paseos entre las fincas, los campos y las montañas que dibujan el paisaje pollensín.